Federación Nacional Campesina: ‘Lo central es el acceso a la tierra’

Entre los principales problemas, desde la FNC manifiestan que los insumos, arrendamientos y alquileres son impagables. “Nos pagan chauchas y palitos por lo que vendemos y más de la mitad de los habitantes del país no pueden acceder a los alimentos que necesitan por la inflación”, señalan desde la FNC.

Las Ferias de la Agricultura Familiar promovidas por la organización buscan visibilizar a quienes producen alimentos para el mercado interno. A la venta de alimentos a precio justo se sumaron además volanteadas y cortes de ruta que apuntan a difundir los reclamos por otro modelo: estatización de la empresa Vicentín, la reglamentación de la Ley de Reparación Histórica de la Agricultura Familiar, el tratamiento y aprobación del proyecto de Ley de Acceso a la Tierra, la creación de un instituto de colonización y la implementación de un plan de arraigo para las juventudes campesinas. También incluyen la efectiva implementación de la Ley 26.160 de relevamiento de territorios originarios, “para poder pelear la restitución de las tierras que son necesarias para estas comunidades”.

La FNC nuclea a organizaciones campesinas de base que trabajan en 18 provincias. Entre ellas, la Unión Campesina de Chaco, la Unión Campesina de Corrientes, la Asociación de Productores de Tucumán y la Asociación de Pequeños Productores de Cuyo.

Sobre la necesidad de políticas de arraigo para las juventudes, Benetti señala que esto “no solamente tiene que ver con contar con herramientas para la producción sino también con la conectividad, los caminos, la inclusión, la capacitación”. Agrega: “Son cuestiones necesarias para que esos jóvenes encuentren en el medio rural la posibilidad de desarrollarse como lo hicieron sus familias”.

Leyes para el campo que produce alimentos

La reglamentación de la Ley de Agricultura Familiar es un reclamo, sostiene la Federación Nacional Campesina, que tiene en cuenta las demandas de acceso a la tierra, a las semillas, fomentos de la agroecología. Otra deuda es la Ley de Acceso a la Tierra, que ya se presentó cuatro veces en el Congreso de la Nación. “Muchos compañeros hoy arriendan a precios exorbitantes los terrenos donde producen y esa ley podría dar respuesta a ese problema”, afirma Benetti. “Lo central es el acceso a la tierra”, remarca.

Por eso, en el marco de las actividades de esta semana, la FNC también participó de la presentación del paquete de proyectos de ley que presentó la Mesa Agroalimentaria Argentina. Las iniciativas que llevó la entidad agraria al Congreso son: Ley de acceso a la tierra, Ley de arrendamientos rurales, Ley de protección y fortalecimiento de los territorios campesinos y la agricultura familiar, Ley de segmentación de las políticas impositivas agrarias, Ley de financiamiento y fomento del cooperativismo y la transición agroecológica.

“Se tendieron puentes con pooles sojeros y petroleros, pero para los de abajo nada”

Sobre el contexto político y social, la federación sostiene: “Se ha agudizado la crisis social y política producto del acuerdo con el FMI y de la deuda externa macrista”. Y advierte que la llegada de Sergio Massa al gabinete nacional “no cambió nada a favor del pueblo”. En lugar de eso, “se tendieron puentes con los terratenientes, pooles sojeros y petroleros, pero para los de abajo nada”, alertan. Por eso reclaman políticas que afecten los intereses de grandes monopolios, terratenientes y monopolios exportadores.

La Federación Nacional Campesina cuestiona que el secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, sostuvo varios —desde su asunción, a principios de agosto— varios encuentros con la Mesa de Enlace. Sin embargo, no hubo ningún encuentro con las familias agricultoras. Al respecto, la organización describe: “Mientras millones estamos en medio de una grave situación económica y social, el 1 por ciento de los terratenientes son dueños del 40 por ciento de la tierra, 4000 grandes pooles de siembra producen más del 75 por ciento de los granos y cinco empresas monopólicas extranjeras exportadoras de grano comercializan cerca del 80 por ciento de lo producido”. Estos sectores, junto al sector financiero, “la levantaron en pala y lo siguen haciendo”, cuestiona, en rechazo a la política que está delineando la gestión de Sergio Massa como ministro de Economía.

Punto por punto, los reclamos de la Federación Nacional Campesina

• Creación de la Empresa Nacional de Alimentos. Estatización de Vicentin.

• Tarifas de electricidad y gasoil para la agricultura familiar.

• Subsidio de emergencia por seis meses para pequeñas y pequeños productores.

• Reglamentación de la Ley de Reparación Histórica de la Agricultura Familiar (27.118), con asignación de presupuesto.

• Tratamiento y aprobación de la Ley de acceso a la tierra y protección de los cinturones hortícolas.

• Entrega de tierras fiscales y mal habidas. Creación del Instituto de Colonización.

• Compra estatal de la producción de la agricultura familiar. Fondos para la instalación de 1000 ferias y mercados populares.

• Plan de arraigo para las juventudes campesinas.

• Ley de arrendamientos. Control de los alquileres rurales.

• Cumplimiento de la Ley 26.160 de relevamiento de territorios originarios y presupuesto acorde.

• Cumplimiento del artículo 75, inciso 17 de la Constitución Nacional: “Reconocer la preexistencia étnica y cultural de los pueblos indígenas argentinos. Garantizar el respeto a su identidad y el derecho a una educación bilingüe e intercultural.”

• Entrega de máquinas, herramientas, insumos para la producción y proyectos productivos para el fortalecimiento de la producción de alimentos (carnes, verduras, frutas, lácteos y huevos).

• Declaración de la emergencia en violencia por causas de género. Refugios para mujeres campesinas en situación de violencia. Guarderías de cosechas en zonas rurales.

• Créditos accesibles y a tasas subsidiadas con un año de gracia.