El Gobierno nacional modificó el Presupuesto 2021 a través de la decisión administrativa 281/2021, con la que se establecieron incrementos para las tareas de varios ministerios nacionales. En el caso del Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca, la resolución otorgó una suba presupuestaria de 1978 millones de pesos para cumplir con el “Programa de Compensación y Estímulo” para pequeños productores sojeros. Con ese pequeño incremento de la partida presupuestaria ya se supera lo destinado al Fondo de Bosques Nativos para todo 2021, que representó el 0,015 por ciento del Presupuesto 2021.
El desequilibrio presupuestario en favor del monocultivo de soja lo marcó la directora de investigación de la Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN), María Marta Di Paola. En este caso, el incremento presupuestario busca la mejora de rentabilidad y competitividad de pequeños productores sojeros, establecido mediante el Decreto 786, en octubre del año pasado como parte de una serie de herramientas establecidas por el gobierno nacional para absorber dólares. El programa de estímulo fue una medida progresiva dentro de un paquete que incluyó nuevas bajas temporarias a las retenciones.
El contrapunto marcado por Di Paola pone en evidencia cómo un pequeño incremento presupuestario ya supera todo lo destinado al Fondo de Bosques Nativos para 2021. Incluso, en la misma decisión administrativa, se reasignan partidas para “atender las necesidades emergentes del régimen de promoción de las inversiones que se efectúen en nuevos emprendimientos forestales”, como parte de la Ley de Inversiones para Bosques Cultivados Nº 25.080, que beneficia tanto a pequeños productores como a grandes empresas de explotación forestal.
Proteger los bosques argentinos con el 0,015 por ciento del Presupuesto 2021
En su análisis del Presupuesto 2021— “Alerta de Spoiler: nada ha cambiado”—, FARN precisa que el Fondo Nacional para el Enriquecimiento y la Conservación de Bosques Nativos no contará en 2021 con la totalidad de los fondos establecidos por la Ley 26.331 de Presupuestos Mínimos de Protección Ambiental de los Bosques Nativos. El monto consignado fue de 1212 millones de pesos para el Fondo Nacional para el Enriquecimiento y la Conservación de los Bosques Nativos y 25 millones de pesos para el Programa Nacional de Protección de los Bosques Nativos.
O sea, un total de 1237 pesos fueron destinados a la preservación de los bosques. El incremento presupuestario para la compensación de los pequeños productores sojeros superó por 741 millones de pesos los fondos anuales para los bosques. Además, el informe de FARN precisa que los fondos totalizan solo un 4,9% del monto que le correspondería por ley, es decir que en lugar del 0,3 por ciento del presupuesto nacional tan solo será dotado con el 0,015 por ciento.
Durante su discurso de apertura de sesiones en el Congreso, el presidente Alberto Fernández destacó un acuerdo con las provincias para “movilizar los recursos económicos del Fondo Nacional para el Enriquecimiento y la Conservación de los Bosques Nativos”, pero el Presupuesto y las iniciativas legislativas dejaron clara la línea de trabajo del gobierno nacional.
“En 70 años nos quedaremos sin bosques nativos”
El ministro de Ambiente, Juan Cabandié, señaló durante la primera reunión del año del Consejo Federal de Medio Ambiente (Cofema) que el 2021 sería un año para avanzar en la modificación de la Ley de Bosques y destacó que, durante su primer año de gestión, se incrementaron en 200 por ciento los fondos para la protección de bosques.
En ese marco, dio a conocer las cifras del Sistema de Alerta Temprana de Deforestación (SAT) que revelaron que en 2020 se perdieron 400 mil hectáreas de bosque nativo en el país: 300 mil hectáreas en los incendios forestales y 100 deforestadas para la ampliación de la frontera agropecuaria y el negocio inmobiliario.
“Si seguimos con esta tasa de deforestación en 70 años nos quedaremos sin bosques nativos”, alertó Cabandié en la reunión del Cofema. La cifra de 1978 millones de pesos para compensar a los pequeños productores de soja, vuelve a surgir como ejemplo del modelo, cuando la deforestación por la ampliación de la frontera agrícola es una de las principales razones de pérdida de bosques nativos.
De acuerdo al informe del SAT, de las más de 100 mil hectáreas deforestadas de bosques nativos durante 2020, 1732 fueron sobre bosques de categoría roja (de muy alto valor de conservación), 47.513 en categoría amarilla (de mediano valor de conservación), 24.401 en zonas grises (bosques nativos no incorporados por las provincias en sus ordenamientos territoriales) y 35.910 en categoría verde (de bajo valor de conservación).
Según el monitoreo de deforestación de Greenpeace, entre marzo y octubre de 2020, se habían deforestado 50.000 hectáreas, principalmente, para el avance de la frontera agropecuaria solo en Santiago del Estero, Chaco, Salta y Formosa. La organización ecologista lanzó la campaña “Deforestación Cero Ya” con el objetivo de frenar lo que define como un ecocidio con complicidad de los gobiernos provinciales.
Según un informe de la Dirección Nacional de Bosques, entre 1998 y 2018, el avance de la frontera agropecuaria arrasó con 6,5 millones de hectáreas de bosque nativo, el 87 por ciento en la región chaqueña. El 43 por ciento de bosque se perdió durante la vigencia de la Ley de Bosques, sancionada en 2007.