El año nuevo Mapuche. Cada 21 de junio, el pueblo mapuche celebra su año nuevo, el comienzo de un nuevo ciclo. Conocé más sobre este día sagrado de celebración que se desarrolló durante miles de años en nuestra región.
El 21 de junio es el solsticio de invierno, el día en que el sol está mas lejos de la tierra, donde el día es más corto y la noche más larga. Las comunidades mapuches se reúnen desde la puesta del sol hasta después del amanecer a celebrar, reflexionar, compartir las charlas, los alimentos y renovar el compromiso con su historia y con su territorio.
Walter David Cañumil Sayuheque, Lonko, de la comunidad Kona Niyeu, de Río Negro cuenta que todos los 21 de junio se renueva el ciclo natural, donde los días empiezan a tener otros procesos, se inicia el tiempo de siembra y finaliza el tiempo de cosecha.
“Nosotros lo llamamos Wiñoy Tripantu, We Tripantu o Wiñol Tripantu, y tiene que ver con renovación de un nuevo ciclo, no el impuesto en el calendario gregoriano, tan diferente a lo natural. Las comunidades son autónomas y cada una tiene su celebración especial propia de su región: la de la zona andina, zona de valles, de mesetas, zona cercana al mar, a los ríos, y las ceremonias se realizan entre el 21y el 24, según cada comunidad”, cuenta el Lonko.
La comunidad que representa Walter es originaria de la zona de la meseta pero su radio de acción abarca desde la zona de Sierra Grande, norte de la Península Valdez hasta Viedma. Walter es bisnieto del Lonko Valentín Sayweke, el ‘bravo Sayweke’, quién resistió el avance del ejército argentino durante la presidencia de Julio Argentino Roca y fue traicionado. Walter, como sus antepasados, fue reconocido Lonko un 21 de junio.
“El 21 de junio es un día muy importante de celebración, de ceremonias. Se mueven muchas energías, conversamos con nuestros antepasados, con toda la dinastía de los Sayweke, con todos los grandes lonkos, y al espirítu de ellos lo hacemos vivir en ese momento, ahi, y vuelven las broncas, las alegrías, todo vuelve”.
Los 21 de junio también se realiza otras ceremonias de profundo sentido sagrado y espiritual para el pueblo mapuche que es el Katan Kawin,que consiste en presentar formalmente a los chicos y las chicas frente al resto de las familias mapuches. El rito de presentación consiste en el Katan, la perforación de las orejas y la puesta de aros que simbolizan el nuevo rol social que se asume. También, en algunos casos, se les otorga un nombre propio originario, nombres filosóficos, que a veces lo soñaron los padres, lo soñaron los mayores y que por alguna razón no los pudieron registrar en el DNI.
La ceremonia del año nuevo Mapuche, paso a paso
Walter cuenta que de la ceremonia participan desde los bebés recién nacidos hasta los ancianos. Las familias se reúnen en un lugar sagrado que designa la comunidad anfitriona. Este 21 de junio será a unos 4km de Sierra Grande, en un lugar entre los cerros, pero el sitio varía, veces se realiza frente al mar, o en la meseta, un altiplano que quedá a más de 150km del océano.
Hoy serán las comunidades de Kintul Folil, Kona Niyeu, Lof Cañumil, Say Hueque, Somuncura, Traun Kutral, Kurru Luan, las que a las 17 horas se reunirán para celebrar la amistad entre las familias, para hacer ofrendas a la tierra, cantar, escuchar historias y compartir el alimento.
“La ceremonia comienza con la ‘planta de banderas’ donde se dan a conocer y se presentan todos los invitados a la ceremonia. Se comparte una merienda y se prepara todo para la cena comunitaria, bebidas y comidas calientes típicas de la zona. Cuando oscurece se enciende una fogata que permanecerá encendida hasta el mediodía del día siguiente”.
“Después de la cena comienza la observación cósmica, que es cuando, una constelación que nosotros llamamos el Prapagnaw, se ubica en un punto central justo arriba nuestro. Luego de la observación, se realizan cantos colectivos y comienzan las narraciones donde los mayores cuentan historias que remiten a cuestiones filosóficas, culturales y políticas del pueblo mapuche“.
Son los Kimche, los líderes espirituales quienes coordinan la ceremonia, que se planifica con varias semanas de anterioridad, donde los Lonkos de cada comunidad, se reúnen y acuerdan los temas espirituales y de actualidad que se van a conversar alrededor del fuego sagrado.
“Cada lonko lleva las inquietudes de su comunidad, hacemos una junta previa, tocamos nuestros ‘temas de agenda’ como hacen los presidentes. Luego, ya en la ceremonia, hay un momento en que se hace una puesta en común sobre la situación de cada comunidad”, relata Walter.
Año nuevo Mapuche: Salida del Sol
“Antes de que el sol salga y hasta que amanece, se realiza ruego colectivo donde se pide y se agradece, es el punto máximo de la celebración, porque es donde hablamos con las fuerzas espirituales de los antepasados y nos proyectamos hacia adelante. Es un momento donde se mueven las energías de nuestros antepasados, es un momento muy íntimo, muy familiar, muy nuestro”.
Luego de la salida del sol, se comparte un desayuno comunitario, se realiza el Katan Kawin y abrazados en un gran despedida, cada comunidad regresa a su territorio, fortalecidos gracias a la ceremonia ancestral, en su lucha históricas por el territorio y la libre determinación como pueblo con identidad e historia propia.
“Lo que no debemos olvidar es que, no es como dicen los libros de historia, que el pueblo mapuche vivía acá. Si no que vive acá históricamente y acá nos proyectamos por mucho tiempo más vivir así”.