En la década de 1990, el jubilado Newton Godoy Mello, ahora de 84 años, decidió transformar el terreno baldío que estaba frente a su casa en una grandiosa plaza, llena de árboles, frutales, flores y otras plantas diversas.
Gracias a sus mejoras, la plaza que actualmente lleva su nombre se convirtió en uno de los espacios públicos más bellos y arbolados de Guaiçara, en el centro-oeste de São Paulo. Para el Sr. Newton, el vecindario ideal es aquel en el que podemos hacer algo para mejorar el entorno de nuestra casa. En su caso, dedicarse a la plaza hizo que su zona de estar fuera más refrescante, agradable y verde.En entrevista con un portal del país brasileño, el anciano dijo que nació en 1937, se casó en su juventud con doña Santa Amalia y juntos tuvieron tres hijos. Trabajó como tapicero y también trabajó en el Hospital Clemente Ferreira durante casi tres décadas, donde se jubiló. Newton consideró vivir en Guaiçara después de hacer un recorrido por la ciudad. Estaba encantado con el lugar y decidió mudarse después de ser seleccionado para un proyecto de vivienda.
Justo en frente de su casa había un terreno baldío, donde el gobierno de la ciudad prometió construir una plaza pública. Sin embargo, la idea nunca llegó a concretarse… Fue entonces cuando el ex tapicero decidió limpiar el área y plantar los primeros árboles y flores.Detalle: el Sr. Newton no tenía experiencia previa en jardinería. Al principio, plantó un árbol de pitanga y varias plántulas. A lo largo de los años, las plántulas dieron punto a docenas y luego a cientos de árboles. El horario de trabajo en el hospital de 12 horas de trabajo y 36 horas de descanso- facilitó el cuidado de la futura plaza, pues dedicaba buena parte de sus días libres a seguir sembrando. En ese momento, quería que la plaza tuviera un estudio paisajístico, pero no pudo hacerlo. Así, pensó en un diseño propio, que fue mantenido por la municipalidad local luego de que se hormigonaran las pasarelas. Casi treinta años después, el diseño y la distribución del espacio del Sr. Newton permanecen intactos. Para el portal brasileño, el jubilado dijo que contó con la ayuda de un amigo, José Luiz Souza, ‘Bisão’, que instaló los bancos y ayudó en algunos otros procesos de construcción. La esposa de Newton, la Sra. Santa, también ayudó con el trabajo. Cabe señalar que la mayor parte de las inversiones necesarias para levantar la plaza corrieron a cargo del jubilado. Desde 1998, la plaza lleva el nombre de “Newton Godoy Mello”, en homenaje al esfuerzo del jubilado. Esto fue posible gracias a una posibilidad legislativa en ese momento, ya que hoy en día no es posible que los espacios públicos reciban nominaciones de personas vivas, lo que hace aún más notable la hazaña. Bien cuidada, la plaza cuenta con mesas, bancos y una iluminación perfecta. Además, la pintura del suelo continúa a cargo del Sr. Newton. Debido a la edad, ya no realiza trabajos pesados y subcontrata este servicio a un profesional de la limpieza. “Me siento agradecido por todo lo que ya hemos logrado y espero que todo lo que ha pasado aquí pueda inspirar a más personas”, concluyó Newton. Artículo cortesía de Portal Ambiental